Usted tiene el derecho humano de recibir una atención respetuosa, segura y de calidad durante su experiencia al dar a luz. Los derechos humanos son aquellos derechos que les permiten a todas las personas tomar sus propias decisiones y vivir sus respectivas vidas con dignidad. Son diferentes de los derechos civiles y no siempre cuentan con el amparo legal que merecen. Los proveedores de atención de salud y los hospitales difieren a la hora de respetar los derechos humanos de los pacientes. Si bien este no es un documento de carácter legal, le recomendamos compartir y analizar esta información con sus proveedores de atención de salud actuales o posibles, además de que visite sus instalaciones. Esto le permitirá conocer sus políticas y prácticas antes de decidir dónde y con quién dar a luz. 

La Ley Núm. 156 de 10 de agosto de 2006, según enmendada, conocida como Ley de acompañamiento durante el trabajo de parto, nacimiento y post-parto, se creó para establecer los derechos que existen durante los procesos de post parto, parto y nacimiento. Conocer estos derechos es necesario para proteger la dignidad y la autonomía de la persona gestante en estos procesos. También establece derechos de la persona recién nacida y del padre en estos procesos.

Esta ley aplica tanto a los procesos que ocurren en hospitales públicos como privados.

A casi todas las personas, en especial a las gestantes, les preocupa el dolor de parto.  Y mientras que, sí es posible tener un parto con poco dolor, es buena idea prepararse con diferentes técnicas y estrategias para ese gran día.  Prepararse para el parto es similar a prepararse para un maratón.  Y al igual que nadie correría 26 millas (42 kilómetros) sin haberse preparado y entrenado antes, tampoco sería apropiado presentarse al parto sin ninguna preparación.  libro se creó con la intención de que tanto la gestante como sus acompañantes estén preparados para este gran día.  ¡El mejor momento para prepararse para el parto es AHORA!!!  

 

Por lo general, cuando hablamos de clases de parto, las personas tienen una idea que esto significa socializar con otras parejas embarazadas, hacer respiraciones extrañas, ver varios videos de parto, todo esto tirado en un colchón en el suelo.  Sin embargo, la preparación para el parto debe ser mucho más que esto.  

 

Por otra parte, nuestra percepción del parto está totalmente distorsionada debido a la influencia de programas de televisión y películas de cine.  Estamos siendo influenciados por nuestro medioambiente social y cultural, haciéndonos pensar en que el proceso del parto se inicia cuando rompemos fuente (aguas); pensando que rápidamente corona la cabeza del bebé;  y hay que tirarse a parir en la primera esquina; todo esto a gritos; donde en el final el resultado es un bebé todo ensangrentado.  Y ni se diga los cuentos de horror de familiares, amigos y hasta desconocidos.  

 

No es de extrañar que muchas gestantes lleguen al día del parto llenas de temor; muchas veces sin ni siquiera reconocer las señales reales de parto, ni los procedimientos comunes que se llevan a cabo durante este proceso; y mucho menos del post parto ni el cuidado del bebé.  

 

Las gestantes son mucho más que un cuerpo con una barriga; las gestantes son seres humanos con sentimientos.  Como la gestante se siente acerca del parto está estrechamente relacionado con cómo esta experimentará este proceso.  

 

Una vez la gestante se ha educado para el parto, ya sea a través de las clases de parto, lectura, videos, etc., ya esta puede tener una idea clara de sus preferencias para el parto, que van desde decidir qué técnicas de manejo de dolor desea utilizar, hasta quienes desea que la acompañen en el parto.  El plan de parto NO es un contrato; más bien es una herramienta de comunicación que sirve para comunicarse, no solo con el obstetra o partera, sino también con la pareja, y con las otras personas que van a acompañar en el parto.  

 

Hay personas que no escriben un plan de parto en lápiz y papel, sino que le comunican verbalmente a su médico o partera, y acompañantes de parto, sus deseos para el momento del trabajo de parto y parto.  Otras lo escriben en un papel; mientras otras lo hacen más formal, y piden que el médico o la partera lo firmen o lo endosen, y lo coloquen en su récord médico.  Y mientras que le ofrecemos varios ejemplos de planes de parto (y hay muchos más que se pueden conseguir en el Internet), lo ideal sería crear el de uno propio.  

Luego de 9 largos meses de espera, ya llego el momento de la llegada del bebé.  Como hemos mencionado antes, el momento del trabajo de parto y parto no es fácil.  Pero la recompensa es que pronto se tendrá el bebé en brazos.  

La acupresión es una de las técnicas útiles para el manejo de dolor de parto.  En la medicina tradicional China, estas se utilizan para ayudar a que el cuerpo trabaje más eficiente.  Y según la medicina moderna, estudios demuestran que estas técnicas de acupresión promueven que el cuerpo libere endorfinas, las cuales bloquean los receptores de dolor del cerebro, ayudando a dilatar la cérvix, y aumentando la eficacia de las contracciones.  Estas técnicas son fáciles de usar; y se pueden utilizar desde el principio de parto, ya sea por el acompañante o por la doula.  

Estudios demuestran que un 83% de las parturientas en trabajo de parto las encontraron beneficiosas; un 60% de estas encontrándolas excelentes para el manejo de parto.  En la medicina tradicional China se dice que los puntos meridianos son una serie de canales que transportan energía (chi) a través del cuerpo.  Estos meridianos son un sistema separado de los nervios, capilares y ductos linfáticos.  Según la medicina China, existen 600 puntos meridianos.  

Los puntos meridianos que aquí mencionamos solo se deben presionar, ya sea para “inducir” el parto de forma natural, o para acelerar y aliviar el dolor durante el trabajo de parto.  Hay que tener en cuenta que el trabajar estos puntos meridianos durante el trabajo de parto, ayuda a que la parturienta se apodere del parto, a la vez que su acompañante o doula se envuelva de forma eficiente durante el parto. El trabajar los puntos de acupresión tiende a ser de gran beneficio si se trabajan una vez comienza el parto, en lugar de dejarlo para cuando ya empiece el dolor fuerte.  Las personas que han utilizado estas técnicas mencionan que no solo el nivel de dolor fue menor, sino que también podían manejar mejor el trabajo de parto, sintiéndose bien, calmadas y relajadas.  Muchas personas han utilizado estas técnicas en conjunto con las técnicas de hipnoparto.

El hipnoparto es una filosofía sobre el parto, que enseña el método de autohipnosis como una herramienta para lograr un parto natural.   Muchas personas están familiarizadas con el hipnoparto, de historias que ven en las noticias o medios sociales; donde la persona que está de parto no parece que se encuentra en trabajo de parto.  Mientras que esto puede parecer irreal; el hipnoparto funciona, siempre y cuando se le dedique tiempo para escuchar y practicar los audios o ejercicios.  

 

La teoría del hipnoparto se basa en la creencia de que la persona puede experimentar un parto con muy pocas molestias.  Se piensa que la respuesta fisiológica de la parturienta a las hormonas de estrés son las que hacen que esta no se pueda relajar durante el parto, causando así más dolor.  De la idea científica de que el hipnoparto logra que la parturienta esté más relajada, y no presente miedo al proceso de trabajo de parto y parto, hace que la parturienta experimente mejores respuestas fisiológicas durante el trabajo de parto.